Acné

El acné se produce en la mayoría de los adolescentes o preadolescentes, también suele ser una manifestación frecuente en las niñas cuando comienzan a cursar su pubertad.

          Es un trastorno de la piel, que se da por el aumento de la actividad de las glándulas sebáceas, al ser estimulada por las hormonas, andrógenos, que se encuentran en mayor concentración en esas edades para el desarrollo de los órganos sexuales.

Las glándulas sebáceas aumentan la producción de sebo (grasa), la cual termina obstruyendo los poros, mientras tanto las bacterias que se encuentran normalmente en la piel aprovechan este momento para crecer y acumularse en ese poro obstruido, dependiendo de la profundidad de esta obstrucción encontramos distintas formas de acné.

          El más superficial es el punto negro o espinilla, luego un poco más profundo el granito que primero es rojo por la inflamación y luego ya se pone blanco o amarillento por la concentración de pus generado por las bacterias. y más profundo los quiste intradérmicos que requieren de medicación y muchas veces de tratamiento quirúrgico.

          En todo adolescente que presente mucha cantidad o esté aumentada la frecuencia de aparición de granitos en la cara es necesaria la interconsulta con un dermatólogo, ya que este problema en la adolescencia es causa de bajo autoestima, y la manipulación de estos granos por el adolescente apretandolos o colocando distintas cremas que no estén certificadas puede producir el empeoramiento del cuadro.

          Una de las pautas más seguras y fáciles de realizar es el lavado de la cara, este debe hacerse por lo menos dos veces al dia todos los dias, tambien se debe lavar luego de realizar educación física o cualquier actividad que genere transpiración en la cara. Se debe lavar con un jabón para pieles sensibles, que no tenga desodorantes ni que sea exfoliante, no se debe refregar la cara, ya que el acné no se produce por suciedad sino por aumento de la grasa. 

          La mayoría de los maquillajes son cremas o polvos que tapan los poros facilitando que se generen más granos, empeorando el cuadro, por lo que las niñas no deben pasar el dia con maquillaje en el rostro.

          No se debe apretar los granos, ya que al romperlos lastimamos la piel generando una puerta de entrada a las bacterias y produciendo una cicatriz que quedara toda la vida.

          Es importante recurrir a un dermatólogo para un tratamiento óptimo y precoz, para lograr que nuestro niño no lleve cicatrices en la cara que lo acompañen toda su vida.

Doctora Jesi
Doctora Jesi

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